El nombre de la cantera tiene su origen en el apellido de un empresario industrial cracoviano Bernard Liban, que, en 1873, fundó aquí su propia calera (si bien merece la pena subrayar que la consecución de piedras de construcción y calcinación de la piedra caliza, tradicionales para la zona de Krzemionki, se remontan ya a la época medieval). Hoy quedan tan solo restos de los hornos de acero y transportadores.

En los años 1942-1944, los ocupadores nazis fundaron en dicha cantera un campo correctivo de trabajos forzosos para polacos. A lo largo de todo el periodo de existencia del campo, estuvieron en el mismo más de dos mil presos, trabajando en condiciones muy duras. Muchos de ellos murieron; la liquidación del campo tuvo un final especialmente trágico. En la actualidad, los sufrimientos de guerra de las víctimas quedan conmemorados en un monumento allí situado.

 En 1993, acudieron al recinto de la cantera los creadores de La lista de Schindler, reconstruyendo allí la realidad del campo de Płaszów: 34 barracones, 7 torres de guardia y una fiel imitación de la villa residencial del comandante Amon Göth. Los caminos se cubrieron con réplicas de matzevas, hechas de hormigón. Se rodaron en ese lugar las escenas ambientadas en el campo: los presos trabajando extremadamente duro, el fusilamiento de Diana Reiter (Elina Löwensohn) y el encuentro de Oskar Schindler (Liam Neeson) con Icchak Stern (Ben Kingsley). Hasta hoy, se pueden encontrar en la cantera restos de la escenografía cinematográfica: placas que imitan matzevas, postes de vallado y escalones.